¡Conoce algunos ejemplos de contratos para facilitar tu gestión!

Conocer a detalle los ejemplos de contratos más comunes es una forma de garantizar la inclusión de todos los elementos necesarios para ratificar su validez jurídica y gestionarlos adecuadamente.

Los contratos son instrumentos esenciales para establecer y asegurar el cumplimiento de los derechos y obligaciones de las partes involucradas en un negocio.

En este artículo, definimos sus elementos obligatorios y algunos tipos de contratos. También, descubrirás cómo un software CLM puede ayudarte a administrar el ciclo de vida de estos documentos con más eficiencia, celeridad y calidad.

Elementos esenciales de un contrato

La existencia y legalidad de un contrato depende de la consideración de una serie de parámetros básicos obligatorios. Su abordaje permite disolver la mayor parte de las controversias derivadas de un posible incumplimiento.

Elementos de existencia

Son los elementos que aseguran la viabilidad de los contratos, implicando así consentimiento y objeto.

Consentimiento

En esta sección, se establece el común acuerdo de los involucrados en llevar a cabo el negocio, manifestando la voluntad de modo expreso —verbal, escrito, a través de la tecnología o signos inequívocos— o tácito, resulta de hechos o actos que permitan presumirla.

Objeto

Configura la cláusula que define la razón y el motivo de establecerse el contrato. Es una de las especificaciones más importantes, ya que implica el propósito del vínculo entre las partes.

Estos requisitos de existencia están debidamente protegidos por el Artículo 1794 del Código Civil Federal.

Elementos de validez

Para que un contrato presente validez jurídica, debe presentar los siguientes requisitos:

Capacidad

La validez de un contrato depende de la capacidad o aptitud de los involucrados para aceptar tratos y negociaciones.

Ausencia de vicios

No se considera válido cuando ha resultado de un error a raíz de la falsa apreciación de derecho o hecho, violencia por uso de fuerza o presión o exista el dolo (mala fe). 

Objeto lícito

Es válido cuando no se opone a las leyes, no incluye un delito o no está prohibido.

Formalidad

La forma también es un requisito indispensable para la validez de los contratos, por eso debe establecerse por escrito y de forma anticipada. En el caso de que no se defina, acarrea la nulidad del documento.

Los elementos de validez se encuentran amparados por el Artículo 1795 del Código Civil Federal.

Ejemplos de contratos

Aclarados los elementos obligatorios de los contratos mexicanos, es hora de centrarnos en los tipos de contratos más comunes.

Arrendamiento

Contrato bilateral en que se regula la relación entre dos partes. El arrendador cede la utilización de su inmueble al arrendatario, a su vez, este se obliga a abonar un monto periódico durante un horizonte de tiempo establecido en el documento.

Se añaden cláusulas abordando los derechos y obligaciones de ambas partes y consecuencias en el caso de incumplimiento, como la reclamación formal de sus derechos ante la justicia.

Asimismo, el contrato de arrendamiento debe presentar de forma clara el estado del bien objeto del documento, así como expresar la posibilidad de renovarlo ante la aceptación de las partes involucradas.

Compraventa

Bilateral, oneroso, formal y consensual, este tipo de contrato implica a un comprador y un vendedor, siendo que el primero entrega una cantidad de dinero al segundo.

Un contrato de compraventa implica derechos y deberes para los dos lados, por lo cual, ambas partes pueden reclamar el cumplimiento de las obligaciones.

Además de las características anteriores, este documento presenta un objeto, ya sea un bien inmueble o mueble, así como es una vía traslativa del dominio, hecho que justifica la entrega.

Comodato

El contrato comodato es un documento que corrobora el préstamo gratuito de uso y disfrute de un bien que será devuelto al finalizar el plazo establecido.

En cuanto a sus características, es muy diferente a los ejemplos de contratos que hemos abordado hasta el momento: es gratuito, unilateral, real (porque involucra una cosa) y de mera tenencia, una vez que no existe el vínculo comprador-vendedor.

La persona que recibe el bien prestado o comodatario:

• debe hacerse cargo de los gastos ordinarios;

• es responsable de la pérdida en el caso de incumplimiento de las cláusulas;

• no paga los deterioros;

• no puede retener el bien;

• responde solidariamente.

Por otro lado, el comodante:

• puede reclamar el objeto del contrato al finalizar el tiempo de uso o su restitución;

• puede reclamar cuando así lo desee si no figuran plazos ni razón de uso en el contrato;

• paga los gastos extraordinarios;

• debe avisar los vicios del objeto prestado para no responder por todas las averías ocasionadas por esos motivos.

Contrato de Trabajo

No basta con encontrar nuevos talentos, es imprescindible cerciorarse de que atiendan las funciones por las que han sido contratados.

A través de la redacción de un contrato de trabajo completo, es posible asegurar una buena relación, basada en la confianza y en la buena fe.

Establecido entre una persona jurídica o empleador y una persona física, moral o contratado, es un documento en el que se explican las condiciones, obligaciones y derechos que abarca el vínculo.

El acuerdo que establece los principales puntos de la relación laboral debe presentar los siguientes elementos:

• Personal;

• voluntario;

• dependencia;

• ajenidad;

• duración.

Como ves, estos documentos incluyen mucha información relevante que ampara un vínculo formal y legal entre las partes.

Hoy en día, a raíz de las tecnologías disruptivas, es posible firmar contratos a distancia, situación que favorece la contratación de los mejores talentos, dondequiera que se encuentren.

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¡Hemos finalizado!

Al culminar la lectura del post, esperamos que hayas obtenido información valiosa acerca de los diferentes tipos de contratos.

Asimismo, esperamos que hayas comprendido los elementos de existencia y validez obligatorios para la legalidad de los contratos en México y te sientas listo para incluir la tecnología al ámbito de la gestión de contratos en tu empresa.

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