Aprende qué es el Internet de las Cosas y cómo puede cambiar por completo a las empresas

Seguramente has escuchado hablar del término internet de las cosas, pues actualmente muchas conferencias, artículos e incluso programas de formación se enfocan en este campo.

Sin embargo, ¿sabes qué significa y qué aplicaciones prácticas podemos encontrar del internet de las cosas en la vida diaria? 

En este artículo encontrarás un acercamiento a este tema que tanto impacto está causando en la transformación digital y la productividad en las organizaciones. 

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¿Qué es IoT y de dónde surge? 

IoT son las siglas que representan el término Internet of Things o en español: internet de las cosas. Y ahora probablemente te preguntarás qué tienen que ver las cosas con el internet…

Este término se refiere a la capacidad que tienen algunos objetos que usamos en la cotidianidad, para conectarse a internet y funcionar de manera más óptima, haciendo más fácil nuestra vida y más eficientes los procesos. 

En otras palabras, cuando los objetos están conectados a la red de internet con el fin de multiplicar sus beneficios, es cuando podemos referirnos al internet de las cosas. 

De hecho, en el ámbito empresarial se conoce también el término EIoT, siglas en inglés para Enterprise Internet of Things, el cual hace referencia al internet de las cosas empresarial y cuyas aplicaciones nos interesa explorar particularmente en este artículo. 

¿Todo esto suena complejo? Veámoslo con algunos ejemplos.

Internet de las cosas en las empresas

El uso que hacen las organizaciones de las nuevas tecnologías determina en gran parte su éxito en la transformación digital. De este modo una empresa que es consciente de la importancia del internet de las cosas para sus procesos, podrá estar siempre actualizada con respecto a las aplicaciones que le sirvan a su operación y sacar ventaja de ellas. 

Por ejemplo, en una actividad tan sencilla como el cuidado de los jardines se puede sacar provecho a través del internet de las cosas. Basta con implementar sensores que regulen y midan la humedad en el ambiente y en la tierra, de tal forma que el proceso se optimice para liberar o cerrar los aspersores según se necesite dependiendo del clima.

Y todo esto puede ser controlado desde un dispositivo conectado a internet, que a su vez esté enlazado con un controlador como un smartphone o tableta. De esto se trata el internet de las cosas. 

Este ejemplo puede parecer simple, pero si lo pensamos de manera escalada podría aplicarse para el control de riego de grandes superficies en las que se producen flores para exportación o incluso en campos utilizados para la agricultura. 

Otras aplicaciones del internet de las cosas en entornos empresariales

Casi cualquier sector de la industria y cualquier área en una organización se puede beneficiar de la implementación del internet de las cosas.

A continuación, verás solo algunos ejemplos de cómo puede verse esta tecnología en la vida diaria, pero este mundo es tan amplio que prácticamente a diario surgen nuevas ideas para darle nuevas tareas a los objetos que usamos constantemente. 

1. En infraestructura

IoT permite controlar señalizaciones como semáforos, radares y sistemas de seguridad en las carreteras, impactando positivamente la asistencia vial en casos de emergencias. 

2. En estudios ambientales

Facilitando la gestión de riesgos y pronósticos meteorológicos. 

3. En producción industrial

Optimizando las cadenas de producción masiva al automatizar y centralizar procesos, además de recolectar información para mejorarlos. 

4. Control de consumo energético

IoT facilita el seguimiento con exactitud del consumo energético en una organización o incluso en el hogar, ayudando así a optimizar el gasto de energía de las bombillas y elementos conectados a la corriente eléctrica. 

5. En medicina y salud

Ayuda al monitoreo remoto y constante de pacientes, alertando emergencias y cambios en su estado de salud en tiempo real. 

6. En la industria de transporte

Permite vigilar los movimientos de los vehículos, haciendo más efectiva la labor logística y la programación de entregas de paquetería, además de ayudar a observar el tráfico en tiempo real. 

7. En la industria del entretenimiento

Favorece el control de dispositivos programados según los itinerarios para los shows. Simplifica también la observación y recolección de data del comportamiento del usuario. 

8. En marketing

Provee información acertada sobre las acciones y reacciones de los usuarios y sus interacciones con aplicaciones y sitios web, posibilitando la toma de decisiones sobre las estrategias futuras para determinado producto. 

Un poco de historia

El término internet de las cosas es relativamente nuevo y se usó por primera vez de forma pública en 2009 por Kevin Ashton en el MIT. Desde ese momento su uso se ha popularizado hasta el punto en que cualquier medio u organización que se dedique a la innovación tecnológica y la transformación digital, tiene algo que ver con IoT. 

Sin embargo, podemos decir que sus raíces se remontan a muchas décadas antes, cuando los experimentos tecnológicos se utilizaron con fines de medición meteorológica en Francia en el siglo XIX.

De esta manera, los científicos conectaron medidores en el Mont Blanc y gracias al uso de ondas radiales pudieron conseguir información del comportamiento meteorológico en París. 

Aunque en ese entonces no se utilizaba el término IoT, sí se manejaba el concepto de conectar un dispositivo con otro utilizando canales de comunicación —en dicha época la radio— para potenciar sus ventajas. 

En resumen

El internet de las cosas permite que las empresas obtengan un conocimiento más amplio y preciso de sus procesos, gracias a los datos recogidos a partir de la conexión a internet de dispositivos tecnológicos de uso común. 

En efecto, las empresas que estén interesadas en comenzar a implementar el internet de las cosas, deben tener en cuenta cuatro requisitos simples para comenzar: 

1. Contar con una conexión a internet.

2. Un dispositivo que permita la conexión a internet, puede ser un ordenador. 

3. Un objeto o «cosa» que tenga capacidad de conectarse a internet.

4. Una aplicación que facilite el enlace entre el objeto y el ordenador.

Para una compañía, sumarse al internet de las cosas puede significar un impacto positivo en sus capacidades de producción y conocimiento de sus propios procesos, limitaciones y ventajas competitivas, lo que al final se traduce en más oportunidades de éxito en su nicho de mercado. 

Si deseas hablar con uno de nuestros asesores para conocer las oportunidades que podemos brindarle a tu empresa, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.