Metodología Scrum: ¿Qué es y cómo mejora el flujo laboral?

¿Te interesa aprender más sobre la metodología Scrum? ¡Entonces, este post ha sido elaborado especialmente para ti!

En efecto, el Scrum se ha convertido en una alternativa extremadamente eficiente y objetiva en lo que se refiere a la gestión de proyectos proporcionando, de este modo, una forma diferente de utilizar el tiempo, organizar el proceso y satisfacer a los clientes. 

Ahora bien, para entender más detalles de este tema, te recomendamos que continúes leyendo nuestro post hasta al final, pues en las próximas líneas encontrarás información valiosa sobre este concepto.

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¿Qué es la metodología Scrum?

Creada por los desarrolladores Jeff Sutherland y Ken Schwaber, el Scrum consiste en una metodología ágil orientada a la gestión y planificación de proyectos de software que tiene como base la formación de equipos pequeños y multidisciplinarios, los feedbacks constantes y la contribución de todos los involucrados.

Básicamente, el método Scrum debe entenderse como una herramienta de orientación del trabajo en equipo cuyo enfoque se dirige hacia alcance de resultados inteligentes y alineados con las demandas típicas de este tipo de proyecto.

En efecto, la metodología Scrum permite que la empresa entregue novedades continuamente de la misma manera que mejora la alineación de las expectativas entre los profesionales que participan en el proyecto. 

Como resultado, podemos decir que la realización de las actividades en equipo siguiendo esta metodología favorece la satisfacción de los integrantes del grupo repercutiendo, de este modo, en su productividad y en la calidad de su trabajo.

¿Cómo funciona esta metodología?

En el método Scrum, los proyectos se dividen en ciclos —por lo general, mensuales— conocidos tradicionalmente como Sprints. 

Cada Sprint representa un Time Box en la que se debe ejecutar una serie de actividades. Como las metodologías ágiles para desarrollo de software son iterativas, requieren la división del trabajo en varias iteraciones, también conocidas como Sprints.

De hecho, las funciones que deben ser implementadas en un proyecto son especificadas en una lista conocida como Product Backlog. Al inicio de cada Sprint, se lleva a cabo una reunión con el objetivo de planificar la puesta en marcha del proyecto. 

En esta primera instancia, el dueño del producto —Product Owner— señala los elementos de la lista y el equipo establece las actividades que deberá implementar para que se cumplan los objetivos del cliente. Así pues, las tareas situadas en un Sprint se transfieren del Product Backlog para el Sprint Backlog.

Al iniciar cada Sprint, el equipo responsable por desarrollar el proyecto se reúne en una ocasión denominada Daily Scrum Meeting cuyo principal finalidad es difundir el conocimiento acerca de lo que se implementó en el período anterior, identificar inconvenientes y priorizar la ejecución de las actividades de la nueva etapa.

Cuando se finaliza un Sprint, el equipo presenta las funciones implementadas en el proyecto mediante una reunión de revisión denominada en inglés como Sprint Review Meeting.

Posteriormente, se realiza una retrospectiva y el equipo se reestructura para planificar el próximo Sprint y, de esta manera, iniciar un nuevo ciclo. 

4 ventajas de utilizar el Scrum en tus proyectos

Si buscas adoptar una metodología de gestión rápida y con enfoque preciso en la calidad del proyecto, es posible que el Scrum cubra tus expectativas. A continuación, presentamos una lista con las 4 ventajas más relevantes aportadas por este método.

1. Procesos transparentes

La metodología centra su atención en el acompañamiento de cada etapa del proyecto estimulando así, que todos los participantes controlen su desarrollo y accedan a información relevante acerca de las etapas durante su tiempo de ejecución.

2. Reducción de errores

La búsqueda por una excelente calidad promueve una potente reducción de las fallas en los productos —software—, dado que todos los colaboradores están concentrados en desarrollar sus actividades de la mejor forma posible.

3. Mayor adaptabilidad y flexibilidad

Como esta técnica se fundamenta en la imprevisibilidad, permite adaptar los proyectos de acuerdo con las demandas emergentes y las nuevas perspectivas del cliente.

4. Feedback constante

Durante las actividades de un proyecto, es indispensable saber si estamos caminando por el trayecto adecuado, es decir, conocer si estamos alcanzando los objetivos propuestos al inicio de la jornada. 

Gracias a ello, la retroalimentación cobra una posición que destaca, facilitando, de esta forma, acceder a información relevante acerca del proyecto, identificar inconsistencias y desarrollar medidas para solucionar problemas tan pronto como aparezcan.

Herramientas del método Scrum para mejorar la productividad

En efecto, el Scrum es un framework comúnmente utilizado para alcanzar un nivel de productividad más elevado durante la ejecución de proyectos y, de esta forma, garantizar la eficiencia y el compromiso de todo el equipo de trabajo, independientemente del rubro corporativo. Sin embargo, ¿cómo podemos maximizar el cumplimiento de las tareas especificadas por el método?

Básicamente, la respuesta se resume a la adopción de herramientas que fomenten el desarrollo y el control de las etapas como:

Asana

El software completo permite que se definan las actividades acordes con cada participante. Asimismo, este recurso muestra las estadísticas de la evolución del equipo y es fundamentalmente útil para monitorear y visualizar todas las tareas y las etapas del proyecto.

Trello

Hoy en día, Trello se posiciona como una de las herramientas más famosas cuando hablamos de gestión de proyectos, dado que facilita crear listas, definir plazos de entrega para cada colaborador, entre otras funciones interesantes.

GanttProject

Además de facilitar la administración de proyectos, este software gratuito posee código libre, es decir, puedes adaptar algunos recursos para que atienda tus necesidades de forma más efectiva y personalizada.

Microsoft Project

Esta herramienta permite: 

• desarrollar actividades;

• definir plazos de entrega;

• gestionar esas actividades.

Como su interfaz es similar al Excel, suele ser accesible para todo tipo de público, incluso para las personas que no conocen la herramienta.

¡Esto ha sido todo por hoy!

Como verificas, la metodología Scrum es capaz de cambiar por completo la gestión de proyectos aportando, de este modo, más agilidad, calidad y eficiencia a los procedimientos necesarios para asegurar la entrega de un producto final de excelencia.

Además de esta tecnología, existen otras herramientas orientadas a la agilización de los procesos empresariales como es el caso de las firmas digitales. ¿Quieres entender cómo este tipo de recurso puede ayudarte a acelerar el cierre de contratos en el ambiente digital? 

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